Esta es una superviviente, es super divertida y cazadora y también muy muy mimosa, parece mentira que, con lo que le gustan los mimos y las caricias aunque sean de los perros, esté logrando sobrevivir.
Mi teoría es que los gatos mimosos están más expuestos al peligro, son más proclives al maltrato.
Pero parece que estoy equivocada, por lo menos en este caso, porque mezcla esa necesidad de caricias con una agilidad y una gracia para intuir el peligro que me tiene maravillada.
Le teníamos preparado su comedero y su cesta para dormir dentro del gallinero para que sirviera para espantar a otros posibles visitantes indeseados, pero ella ha elegido la terraza y el sofá, aunque no abandona su deber y todos los días se da un paseíto por el gallinero, el huerto, incluso por el almacén.
Se pasea alegremente por el borde de una malla y salta al tejado del vecino desde la barandilla.
Como a todos los gatos y también a mí, le encanta tumbarse al sol y lo hace al lado de las tomateras ¿puede haber un sitio mejor? El olor de la tomatera es muy agradable (habrá ambientador con ese olor).
Todo esto es para contar que ya se me han muerto los otros dos gatos, me siento una asesina...
pero... no he podido hacer nada... la vida a veces te domina y aunque luches, te cuesta gobernarla...sobre todo si tienes dos perros enormes que pasan muchas horas solos.
Tengo una pena enorme.
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