jueves, 20 de noviembre de 2014

Noviembre 十一月

Hace un montón de noviembres, me encontraba en la sala de espera del pabellón de maternidad  del hospital de Basurto, con mi padre que yo pensaba que estaba demasiado mayor para esperar 14 horas a que llegara al mundo su primer nieto, era un día lluvioso y frío y ya de noche la sala de espera solo nosotros, mi cuñado pegado al gran ventanal mirando ese patio desolado, mi padre consumiendo sus nervios, paseando sin parar de un lado a otro de esa desangelada sala y yo que esperaba que la mala suerte que creía acompañaba mi vida, me deparara un sufrimiento mas.
Entonces salieron a decirnos que habían decidido hacer cesárea, recuerdo que yo pensé :" Por fin"
 En  aquel entonces para pasar de un pabellón a otro incluso los traslados de enfermos se hacían por la calle, así que a partir de ese momento los tres pegamos nuestras caras al ventanal, en unos minutos del pabellón de enfrente entre la oscuridad surgió la blancura de la enfermera cubierta con un paraguas y un bulto totalmente envuelto en albal.
Recuerdo que miré a mi padre y me dio mucha pena, estaba convencida que nos iban a decir:" lo sentimos mucho no se ha podido hacer nada"
Pero no, la enfermera se acercó a los tres que estabamos petrificados, abrió una rendijita en el albal y allí estaba mi sobrino, la carita mas bonita que yo habia visto en mi vida, sano y salvo, y di gracias al Dios que da paz, que me mantuvo durante 14 horas en calma.
Hoy también he agradecido al Dios de todo consuelo y tiernas misericordias que me mantenga en calma y me de una maravillosa esperanza.
También he pasado muchas horas en una sala de espera, pero era en el tanatorio de Villajoyosa ha fallecido mi suegro y he podido notar en primera mano la diferencia entre como sostiene la fe a los verdaderos creyentes, como la verdadera fe, hace personas valientes, solidarias, que arrinconan los intereses propios que incluso arriesgan su salud para proteger el bien común.
Y me he acordado mucho de mi padre, que el mes que viene cumplirà 87 y no tiene fe...solo mucho miedo a la muerte.



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